Reflexiones del trabajo en Red
Las I.E.S. están llamadas a atender las demandas de los egresados más allá de las coyunturas provocadas por las certificaciones y acreditaciones o las elecciones de directivos docentes. Y los egresados tenemos la responsabilidad, en aras del mejoramiento de la calidad de vida del estamento, de adelantar una cruzada en torno a la legislación de un salario mínimo profesional, que rompa con la potestad que se ha abrogado el sector productivo, a la hora de tasar el valor de los servicios profesionales que requieren para resolver las demandas de sus empresas.
Pues como están las cosas es lo mismo, desde el punto de vista salarial, ser técnico, tecnólogo o universitario, no obstante las demandas del sector productivo sean explícitamente diferentes.
Es necesario además que esta legislación se ajuste a la Ley del primer empleo (Ley 1429 de 2010), esto en aras de una política pública que procura disminuir los niveles de desempleo y mejorar las condiciones laborales de todos los Colombianos.
Por: María Elena Herrera Patiño
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